Elsie y Daniela se conocieron en 2016, cuando Daniela empezó a trabajar para la misma empresa que Elsie. Ambas tenían novios de toda la vida en ese momento. Empezaron a forjar una amistad muy rápidamente dentro de la oficina, pero no pasó mucho tiempo antes de que floreciera en una situación de mejores amigas fuera del trabajo. Empezaron a hacer ejercicio juntas, a comer juntas en restaurantes, a comprar café la una para la otra, a hacer senderismo y a hacer cualquier otra cosa que se te ocurriera. Daniela sintió una conexión muy fuerte con Elsie. La hizo sentir emocionada, feliz, segura y como si pudiera ser ella misma al 100%. Daniela se convenció a sí misma de que era una conexión de almas gemelas que encontró en una amiga. Elsie sintió lo mismo, pero, por supuesto, las dos nunca pensaron en ello. Como ambas tenían novios y eran los únicos que realmente habían tenido, no había forma de que ninguna de ellas pudiera pensar que algo pudiera pasar entre ellas. No solo eso, sino que ninguna de ellas se consideró gay, lesbiana, bisexual o queer. Ambas tenían sentimientos indescriptibles la una por la otra. Daniela nunca quería irse cuando salían y Elsie (que era la peor texteadora del mundo) le respondía los mensajes de texto a Daniela inmediatamente desde el momento en que se despertaban hasta que se iban a dormir. Obviamente se estaban enamorando, pero estaban en negación. Nunca haber tenido una experiencia como esta en sus vidas fue realmente aterrador. Elsie y Daniela pensaron que se casarían con las personas con las que estaban y también lo pensaron sus familias. Un día, ambas se dieron cuenta de que lo que sentían era amor mutuo y tenían que tomar la decisión de romper con sus novios y estar juntas o dejar de estar en la vida de la otra. Ninguna podía imaginarse vivir sin la otra y fue entonces cuando tomaron la decisión de decirles a sus novios y estar juntas. Nunca en la vida de Daniela pensó que tendría que salir del armario y Elsie tampoco. Ambas son hispanas. Elsie es mexicana y Daniela es costarricense. No es lo más aceptado en sus culturas, así que fue aterrador. Y, durante todo este tiempo, todos pensaron que eran solo amigos, por lo que la noticia sería un shock para ellos. Fue lo más difícil que cada persona tuvo que hacer, pero sabían que seguirían viviendo una mentira si hacían algo diferente. Daniela se lo contó a su familia inmediata y, aunque estaban en shock, la mayoría de su familia le dio amor y apoyo. La madre y la hermana de Elsie fueron igual de comprensivas y amorosas. Para Daniela y Elsie, dejar a sus novios de mucho tiempo, apenas descubrir quiénes eran realmente, y salir del armario fue lo más valiente que han hecho en su vida. Algunos miembros de la familia tienen opiniones muy firmes y no están de acuerdo con todo hasta el día de hoy, pero Elsie y Daniela están enamoradas, son las más felices que han sido y están muy orgullosas de ser parte de la comunidad LGBTQ+. Daniela y Elsie se identifican como pansexuales y han estado juntas durante 3 años en noviembre. 😊💕
Esperamos que esta historia les brinde valentía y fortaleza a quienes se encuentran en situaciones similares. Y para quienes no tienen la suerte de tener familias que los acepten tanto como nosotros, la comunidad LGBTQ+ es su familia y estamos aquí para ayudarnos mutuamente.
